Pocas cosas en común tienen Leo con Escorpio. Su propia naturaleza es el mejor indicador de ello. Así, Leo es un signo de fuego y escorpio perteneciente al ramo del agua nos hablan acerca de relaciones tortuosas. Todas ellas caracterizadas por un permanente estado de negación. Su carácter dominante es el principal factor motor de todo ello. Eso sí, al momento de conocerse serán atraídos el uno al otro con mucha fuerza. Ambos signos deben trabajar uno al otro para mantener viva su relación. Una relación Leo-Escorpio será una importante oportunidad para demostrar tu verdadera paciencia, comprensibilidad y amor por el otro.